1. Jugar es aprender.
Los niños nacen aprendiendo. Cada acción e interacción es una lección.
2. Jugar beneficia el desarrollo de su hijo.
Socialmente – ayuda a los niños a desarrollar relaciones, enseña comunicación y confianza en la experiencia
Emocionalmente – permite a los niños expresar sus sentimientos y alivia el estrés
Intelectualmente– promueve la curiosidad y le desafía para desarrollar habilidades y resolver problemas
3. El juego viene en muchos tipos
Jugar en solitario
Los bebés pasan una buena parte del tiempo en jugando en solitario. Juguetes sencillos como bolas o un móvil ofrecen un sinfín de entretenimiento.
Los niños pequeños y en edad preescolar utilizan el tiempo a solas para crear lo que sólo ellos pueden imaginar.
Los niños en edad escolar pueden utilizar su tiempo de juego a solas para desarrollar ideas y hacer sus propias historias.
El juego paralelo
Alrededor de la edad de 2 a 3, los niños que empiezan a caminar disfrutan de estar cerca de otros niños. Pueden jugar uno al lado del otro y en realidad no interactúan entre sí. Los niños a esta edad generalmente no están dispuestos a compartir.
Juego en grupo
Los niños están listos para compartir ideas y juguetes aproximadamente la edad de preescolar. Jugar en grupo ayuda a los niños a desarrollar auto-control, empatía y habilidad para resolver problemas.
4. A los niños se les debe permitir guiar su propio juego.
Al elegir su propio método de juego, los niños experimentan una sensación de libertad. Desarrollan habilidades de toma de decisiones y confianza en sí mismo.
5. Los padres deben establecer un tiempo especial cada día para jugar con sus hijos.
Jugar con tu hijo es una experiencia de creación de la relación. Demuestra que él es importante y sus ideas son importantes para usted.
6. Simplemente divertirse.
Cuando juegue con su niño, dale toda su atención.
7. Jugar promueve la creatividad.
Usar juguetes sencillos como bloques para despertar la imaginación de su niño. Un bloque puede ser un camión, pero un camión suele ser todavía un camión.
8. Jugar es saludable.
Jugar alivia el estrés y la actividad física ayuda a prevenir la obesidad.
9. Jugar en el exterior.
Todos necesitamos aire fresco y ejercicio. El juego al aire libre requiere que los niños utilicen sus músculos grandes. Esto les ayuda a desarrollar la coordinación muscular, equilibrio y fuerza.
10. Jugar enseña a través de la experiencia.
Midiendo y vaciando arena ayuda a los niños a aprender sobre los pesos y medidas. Ellos absorben lo que aprenden a través del juego.